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¿Quién soy?

Es una pregunta difícil, como cuando te preguntan ¿Cuéntame de ti?... Siempre nos vemos el lado bueno, pero no aceptamos ni mencionamos nuestro lado oscuro.Sin tanta introducción, soy una persona que como dicen en mi tierra "soy echada pa' lante", con bases, principios y valores que aún conservo de la crianza, en mi vida no reina la doble moral, soy lo que soy sin temor al qué dirán, sé lo que tengo y sé lo que puedo dar, sé para donde voy y por dónde voy, creo en mí y en mis capacidades.Reconozco que como todo ser humano tengo mis debilidades y defectos de fabrica, no quiero culpar mis genes, pero como buena Santandereana, soy de temperamento fuerte sin abusar de él. En esta vida todo es retro alimentación y no debemos perder el rumbo de lo que somos, lo que queremos y para donde vamos.

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Vaivén

Irreverente, insaciable, impredecible. Algunos días se levanta azul, otros cristalino, y a veces se hace el verdoso. Baila al ritmo del viento, mientras le saca espuma a la costa. Y cuando el sol se arropa con él,  la luna sale para brillar ante su grandeza.

Sin aliento

Respiró  hondo, se llenó de valentía y pidió el ascensor. El sudor surgía al ritmo de su corazón. Subía el ascensor, también la adrenalina. Se detuvo en frente del 402, sus manos temblaban. Seguía ensayando en voz baja cómo le diría que la amaba. Timbró la primera vez, nada pasó. Lo hizo de nuevo, y de nuevo, nada. La tercera es la vencida y justo antes de presionar el botón, un vecino que llegaba de pasear a su perro le quitó el aliento. Hace una semana ella se había mudado.

Me acostumbré

Me acostumbré a levantarme en las mañanas y saber que estás a mi lado, me acostumbré al olor que dejas en mis almohadas, me acostumbré a tener en las mañanas alguien a quien darle los buenos días, me acostumbré a sentir la necesidad de quererte, me acostumbré a suspirar sin darme cuenta. Decían que se necesitaba 21 días para adquirir un hábito, pero nunca me dijeron que en 21 días uno podía acostumbrarse a querer tanto a alguien.